En esta ocasión nos vamos a referir a una
incómoda, molesta y en ciertos casos estigmatizante enfermedad: la psoriasis,
que es tratada con diferentes medicamentos como esteroides o corticoides,
con numerosos efectos secundarios. Frente a éstos, está demostrando una gran
eficacia el uso del aloe vera, tanto en forma de gel como en forma de
jugo bebible. Pero no nos llamemos a engaño, la medicina no ha podido a día de
hoy proponer una cura para la psoriasis, tan solo puede ofrecer tratamientos
paliativos a base de compuestos químicos. Frente a ellos el aloe vera,
un producto 100% natural cuya capacidad regeneradora de la piel está
demostrada, se muestra como un eficaz método para aliviar y disminuir los
molestos efectos de la psoriasis, sin los efectos secundarios de los
compuestos químicos.
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| Detalle de psoriasis en la zona del codo |
Esta enfermedad se manifiesta bajo diversas
formas e intensidades y afecta por igual a hombres y mujeres, pudiendo surgir a
cualquier edad, aunque el grueso de los casos se produce entre los 15 y los 40
años. En las manifestaciones más benignas cursa con sequedad y descamación de
zonas concretas de la piel, pero también puede mostrar síntomas más molestos,
como inflamación, enrojecimiento, irritación, picores e incluso agrietamiento
doloroso de la piel. Puede afectar a zonas pequeñas como nudillos o codos, o
presentar síntomas en zonas muy extensas del cuerpo. Puede afectar a cualquier
zona del cuerpo.
La psoriasis no es una enfermedad
contagiosa, tampoco es grave (no pone en peligro la vida del paciente), pero no
cabe duda que en sus manifestaciones más severas disminuye enormemente la
calidad de vida de quienes la sufren, no solo por los efectos físicos como
quemazón, picores o dolor, sino por sus efectos psicológicos sobre la
autoestima de quienes la padecen, por el rechazo que produce a la vista de los
demás cuando aparece en zonas normalmente visibles, como la zona capilar, los
codos, rodillas o manos.
No se conocen con exactitud las causas que pueden
producir la aparición de la psoriasis, achacándose ésta a un factor
genético hereditario que afecta al sistema inmulonógico. También se atribuye su
aparición a la acumulación de toxinas en el organismo. Lo cierto es que cuando
la psoriasis aparece lo hace para quedarse, pues se trata de una enfermedad
crónica y quien la ha padecido alguna vez no está exento de tener un nuevo
brote en cualquier momento. No obstante esto no significa que sus efectos se
den de forma continua, sino que la psoriasis aparece de una forma gradual pero
repentina, de manera que la persona que sufra de psoriasis puede tener épocas
asintomáticas y épocas en las que se acentúe la enfermedad. Estos cambios no
pueden asociarse a cambios estacionales, pero sí se cree que factores como el
estrés pueden agravar los síntomas. Además es de todo punto imposible hacer
predicciones sobre su evolución, puede mejorar o empeorar notablemente, incluso
bajo tratamiento.
Todo ello hace que quienes padecen psoriasis deban
acostumbrarse a convivir con su enfermedad, pero pueden encontrar un buen amigo
en ese doloroso camino: el aloe vera. El uso frecuente de aloe vera,
sobre todo en crema o gel, aplicándolo sobre las zonas afectadas disminuye
notablemente los desagradables síntomas de la enfermedad, y su uso preventivo
ayuda a que los brotes de psoriasis tengan menor virulencia. No obstante,
siendo muy recomendable el uso de aloe vera en el tratamiento de la psoriasis,
no debemos olvidar que estos beneficios serán mayores cuanta más constancia
tenga el paciente en la aplicación del aloe vera en las zonas afectadas y que a
pesar de su poder regenerador e hidratante, no podemos afirmar que el aloe
vera sea una cura para la psoriasis (a día de hoy no se conoce cura), solo
hace desaparecer los síntomas en las manifestaciones menos fuertes y disminuye
los síntomas de los casos más virulentos........, que no es poco.
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